martes, 22 de marzo de 2011

Izquierda Organizada

Al filo de la medianoche el humo blanco surgió del Consejo Nacional del PRD. Jesús Zambrano Grijalva, fue elegido Presidente Nacional y Dolores Padierna Secretaria General. La toma de protesta fue la culminación de un largo proceso de negociación política. Los agoreros del desastre se quedaron con las ganas de ver a un PRD fratricida.
Aquellos que desconocen a la izquierda mexicana, confunden debate acalorado con “ruptura”. Ignoran que el PRD es un partido de mujeres y hombres libres que actúan y proceden de acuerdo a sus ideas. La izquierda no es una masa homogénea que obedezca ordenes o mandamientos de sus lideres. La época en que se colgaban las efigies de los “padres fundadores” (Marx, Engels, Lenin, Fidel, El Ché) quedaron atrás. Afortunadamente comienzan a quedar atrás también los tiempos en que el voto (o el veto) del cacique en turno eran suficientes para cambiar el rumbo de un congreso o un consejo.
La izquierda mexicana avanza y crece. Y ese proceso de crecimiento es difícil, lento y a veces doloroso. El proceso de crear instituciones no es sencillo. Por ello es altamente gratificante, el hecho mismo de que hoy podamos estar hablando de la elección institucional de un Presidente Nacional en el marco del Consejo Nacional, aun con todos las particularidades y curiosidades que tendrá la compleja cohabitación entre los “chuchos” y los “pejistas”.
Mención especial merece la participación del guerrerense Armando Ríos Piter que consolidó su presencia como personaje nacional del PRD. Ya en la cámara de diputados, el Jaguar se había convertido en el principal operador en materia económica del partido pero ahora reafirma y extiende su presencia al interior del PRD. El cambio generacional llegará al partido y a Guerrero. Los obstáculos y piedras en el camino, sólo fortalecen al personaje y al equipo. Al tiempo.
Mientras en el PRD se decidía el cambio de dirección, Andrés Manuel López Obrador presentaba en el Auditorio Nacional su Nuevo Proyecto de Nación y anunciaba oficialmente el nacimiento del Movimiento Regeneración Nacional, MORENA.
El documento que presenta Andrés Manuel es digno de lectura y estudio. Casi todos los puntos son atendibles y no hay manera de no estar a favor de ellos. Sin embargo, pienso que para que el “nuevo proyecto” pueda convertirse en realidad, debería de incluir variables económicas, de lo contrario parecería más un credo o un catálogo de ideas bien intencionadas que un Proyecto de Nación. El movimiento que encabeza López Obrador, ha ido creciendo lenta y silenciosamente a lo largo y ancho del país. Andrés Manuel cree firmemente que con organización social de base, será imposible que le arrebaten un eventual triunfo electoral. Creo que a MORENA le hace falta acercarse mas a la sociedad civil. Dejar de ser un movimiento de radicales y acercarse a posiciones menos intransigentes. A la sociedad civil de pronto le espantan las estridencias y excentricidades de diversos personajes del movimiento. Si López Obrador logra derrotar el cerco político que le han impuesto los ultras, habrá de consolidar un gran frente que difícilmente podrá ser detenido.
La izquierda en México se prepara para contender en los procesos del 2011 y en la gran contienda del 2012. Que nadie se llame a engaño. Cuando la izquierda va unida es una poderosa maquina electoral difícil de derrotar. Los recientes resultados en Guerrero no dejan lugar a dudas. No existe militancia más entregada, comprometida y apasionada que la de la izquierda mexicana. Sin duda las cúpulas habrán de llegar a un acuerdo para plantearle a la militancia la mejor opción político-electoral. Si llegada la hora, Andrés Manuel encabeza las preferencias, todos habremos de apoyarlo con fuerza. Si en cambio es Marcelo Ebrard la mejor opción o incluso un ciudadano prestigiado, también le apoyaremos sin cortapisas.
Lo que necesitamos es seguir construyendo una y si es posible varias estructuras organizacionales que no tienen por qué ser excluyentes y sí complementarias.
La izquierda necesita partido, necesita proyecto de nación y necesita líder. No podemos prescindir de ningún elemento. Ha llegado la hora de mirar hacia el futuro y volver a convertirnos en un partido al servicio de la sociedad, un partido al servicio de México.

miércoles, 16 de marzo de 2011

La Gran Ola


El 11 de marzo pasado queda inscrito entre los días infaustos en la historia de la humanidad, de Japón y del Océano Pacífico.
A todos los habitantes del Pacífico, de esa inmensa e importante Cuenca natural, social, humana, económica y cultural, nos cimbró el alma primero el terremoto y después el Tsunami. El efecto natural se expandió en olas de solidaridad y zozobra.
Todavía no salimos del asombro ni son conocidas las consecuencias en toda su magnitud. La sociedad instantánea padece un Tsunami de estupor. Somos todo y no somos nada. Los seres humanos somos una especie razonable. La única que atenta contra si misma. Somos auto exterminables. Los fanatismos y la ignorancia nos vuelven soberbios, nos creemos inmortales y eternos. No hemos aprendido a vivir y no sabemos morir. Los humanos no siempre fuimos y no siempre seremos. La sociedad evoluciona y afectamos a una naturaleza que no nos pertenece, de la cual somos una parte frágil, así, atentamos en nuestra propia contra.
El 11M nos debe incitar a una reflexión colectiva. Hoy la sociedad está mejor que nunca y vivimos peor que nunca. Nosotros los surianos formamos parte de la Cuneca del Pacífico pero carecemos de una noción responsable de pertenencia. El modelo turístico y el desarrollo requieren un giro responsable que armonice el progreso con la conservación natural. Toco madera, pero necesitamos imaginar lo que nos puede ocurrir. Ya pasó un evento meteorológico del cual no tenemos memoria: Nuxco sufrió un desastre similar, una inundación de la cual poco sabemos. Vivimos sobre la falla de cocos y será hoy o algún día pero los riesgos son reales. No aprendimos nada del Paulina, repetimos el mismo paradigma urbano y turístico.
El día después en Acapulco fuimos obsequiados con el espectáculo del cardumen de sardinas en La Angosta, turistas, pescadores, medios, observamos gozosos el extraordinario fenómeno y también debe servirnos para entender que somos parte integral de la Cuenca del Pacífico.
Los surianos tenemos el privilegio de la ubicación estratégica y nuestros bosques y selvas nos prestan extraordinarios servicios ambientales que cuya valoración ni siquiera intentamos.
Desde siempre mis primeros tres años viví impresionado por la estampa La Gran Ola de Kanagawa del pintor Katsushita Hokusai (1760-1849), una copia certificada le fue obsequiada a mi padre en 1977 en ocasión de su asistencia al Congreso de Partido Comunista Japonés. Los japoneses y los asiáticos en general sobreviven en tensión por desastres similares. Y tomamos nota de la gran y permanente inversión de Japón en tecnología, reglamentos de construcción, previsión y protección civil y sin embargo Japón vive en la cima de la tecnología y en la cima de la vulnerabilidad
Somos absolutamente vulnerables. Somos bahía y oleaje y Tsunami es bahía y olas descomunales.
Es mucho cuanto podemos hacer y poco lo que nosotros hacemos. La humanidad pasa de la zozobra al pesimismo, a la indiferencia. Todos requerimos una entrega consciente al cambio, a la reflexión, a vivir con perspectivas claras.
Somos victimas de la crisis mundial de alimentos, de las guerras incesantes, del predominio del capital financiero y del establecimiento militar. Padecemos por una suma complicada de crisis y los riesgos de la ola expansiva nuclear y radioactiva son incesantes.
El Tsunami nos invita a la cultura de la vida, a leer, vivir, escribir, luchar, hacer, reclamar, proponer, aprender a repudiar a la guerra y superar la cultura de la muerte y el circuito perverso de vivir para matar y matar para vivir. Y sobre todas las cosas a ejercer una intensa solidaridad recíproca. Acapulco ha sido objeto de hermosas muestras de solidaridad y hoy es tiempo de corresponder a nuestros vecinos y hermanos japoneses víctimas de la tragedia del 11M.
No debemos olvidar que todos somos habitantes de esta inmensa y a la vez pequeña Cuenca llamada Océano Pacífico.

lunes, 7 de marzo de 2011

El patio trasero

Los acontecimientos en Libia suben de intensidad, aunque cada día parece más remota una salida al conflicto que no implique un baño de sangre inocente. Lo que en un principio parecía un conflicto social semejante al egipcio, se ha convertido en una inminente y cruenta guerra civil. Muamar el Gadafi parece no tener la intención de abandonar el poder pacíficamente buscando un exilio dorado, como han hecho sus homólogos defenestrados. Ha dicho que morirá matando. Parece imitar lo que decía el gran intelectual priista y líder obrero vitalicio Fidel Velázquez: “a balazos llegamos y sólo a balazos nos iremos”.
Las aristas del tema son diversas. Para empezar, Libia es el mayor proveedor de petróleo para Europa. Durante años, los países occidentales han ignorado las violaciones a los derechos humanos en los países islámicos, particularmente los mediterráneos. Han preferido la política de la avestruz. Han preferido no ver lo evidente. Nadie quiere un conflicto a 1000 kilómetros de Roma. Un avión MIG de fabricación rusa, podría llegar de Trípoli a Roma en menos de una hora con la carga que quisiera transportar.
África del Norte ha sido durante años –parafraseando a los norteamericanos y su relación con América latina– su “backyard” su patio trasero. La relación entre España y Marruecos; Francia y Argelia; Libia e Italia; ha sido estrecha, tensa, intensa y complicadísima. Los lazos culturales, económicos e históricos son milenarios. Desde los tiempos de la antigua Cartago el comercio y la guerra en el Mediterráneo han ocurrido de manera periódica. Para occidente, Libia no es un lugar remoto, desconocido y olvidado como Vietnam, Afganistán o Irak. Por ello y por la amenaza que implica a la seguridad interna de la Unión Europea, es previsible y acaso deseada, una participación “humanitaria” internacional coordinada.
El pueblo libio parece estar abandonado. Es víctima del fuego cruzado en la lucha por el petróleo. Es difícil aventurarse a adivinar lo que ocurrirá en los próximos días y las consecuencias que un conflicto de estas dimensiones traerán al país, a la región y al mundo entero. Por lo pronto, los precios del crudo se han disparado producto del nerviosismo y de la especulación financiera.
El mundo es un pañuelo y lo que pasa en Libia afecta al mercado mexicano. Por eso es necesario avanzar en el tema de la gobernanza mundial. El tema surge cada que hay un conflicto global pero se vuelve a esconder en cuanto se calman los vientos. La delgada línea que separa la soberanía de las naciones del interés mundial tiene que ser discutida y debatida. En nombre de ésta (doña Soberanía), se han permitido atroces crímenes de lesa humanidad y genocidios intrafronterizos.
Las potencias mundiales sufren de una especie de miopía selectiva: sólo ven lo que quieren ver. Por ejemplo, nadie dijo nunca nada sobre los excesos y las extravagancias de los dictadores que han caído como piezas de dominó en la región mediterránea. De la misma manera, nadie parece indignarse por el estilo de vida de los jeques árabes que gastan a manos llenas durante sus vacaciones veraniegas en las costas españolas, francesas o italianas. Reino Unido no parece indignarse de las fortunas que gastan los Gadafi en sus tiendas y los Estados Unidos reciben con los brazos abiertos a los príncipes petroleros –aun con señalamientos de ayuda al terrorismo– siempre que presenten sus tarjetas platinadas por delante. En el colmo de la impunidad enmascarada de libertad, el sistema bancario Suizo llena sus arcas de dinero sangriento. En una nueva modalidad, ahora “descubren” a los sátrapas, se dicen “indignados” por su fechorías y les “retienen” el dinero que han saqueado de sus pobres países. Ladrón que roba a ladrón…
Sin embargo, el tema de Libia si puede significar un cambio en este sentido. Europa no puede mirar a otro lado cuando el fuego le está llegando a los aparejos. El mundo no puede mirar hacia otro lado mientras un desquiciado –a cuyo lado Sadam Hussein podría pasar como el gran estadista– dispuesto a todo, masacra a su pueblo y amenaza al mundo con armas de destrucción masiva, apenas al otro lado de ese gran charco que es el Mediterráneo.
Veremos si los grupos de la sociedad civil organizada europea que tanto se indignan de lo que pasa en América latina y otros lugares remotos del mundo, actúan con el mismo ahínco cuando se trata de su patio trasero y no de el del vecino. Veremos si los gobiernos, la ONU, la OTAN y otras instituciones, por fin dejan de hacer exhortos y comunicados y pasan a la acción efectiva.

martes, 1 de marzo de 2011

Un Partido de Gobierno

Ante la anunciada renuncia anticipada (el periodo para el que fueron elegidos fenece en mayo) de varios miembros del Secretariado Estatal del PRD que presuntamente se integrarían al Gobierno del Estado de Guerrero, es necesario que el partido tome algunas definiciones y decisiones.
Es necesario que el PRD intente convertirse en el partido del gobierno, en el partido que desde el gobierno haga que su plataforma política pase de ser letra muerta a ser acción y obra de gobierno. Para esto, es necesario que sin convertirse en un Partido de Estado a imagen y semejanza del PRI, se convierta en un partido de gobierno, como lo son los partidos que ganan las elecciones en las democracias avanzadas.
El Partido debe de acompañar al gobernador, sin ser su subordinado; debe de ser su aliado sin ser sus empleado. Debe de señalar las fallas y debe de criticar pero proponiendo alternativas viables. El remedio y el trapito. El partido debe de estar cerca de la toma de decisiones, debe de ser el principal instrumento para la comunicación de la obra del gobierno.
Las diferentes expresiones deben de alcanzar un acuerdo político que permita un interinato hasta que existan condiciones para realizar un proceso interno inmaculado. La situación del partido a nivel nacional también es una condicionante para el relevo de la dirigencia estatal. Por ello es el momento de la política de alturas. Es momento de que alcancemos un pacto para llegar al Consejo Estatal citado para el 26 de marzo con un acuerdo mínimo que nos permita mandar un mensaje de unidad y fortaleza. El PRD de Guerrero demostró el pasado 30 de enero que cuando va unido es una aplanadora organizacional y electoral. Los problemas llegan cuando somos incapaces de dirimir nuestras diferencias internas.
Otra asignatura pendiente es el llamado a la disciplina interna. De ninguna manera podemos dejar sin castigo a los militantes que públicamente apoyaron a candidatos de otros partidos. No se trata de una noche de cuchillos largos ni de una cacería de brujas. Se trata de que aquellos que jugaron contra su partido reciban una sanción contundente y ejemplar. Si no lo hacemos ahora, dentro de un año aquellos que traicionaron a su partido, estarán dándonos clases de ética política tal como ocurrió con los traidores del 2008.
Los retos para la nueva dirigencia del partido son muy puntuales. En primer lugar es fundamental terminar el proceso de integración del padrón de militantes. Sin un padrón confiable y robusto, estaremos condenados a procesos internos cuestionados y cuestionables. Es necesario también organizar al partido en cada uno de los seccionales del estado. El PRD es un partido que sólo se mantiene organizado durante los procesos electorales y pasando estos, se desarticula. Lo que debemos de hacer es convertir a nuestras estructuras electorales en estructuras de organización social para la gestión.
Debemos de crear comités para las obras y acciones de gobierno. Que la organización territorial se transforme en organización para el gobierno. De una vez por todas, tenemos que ponernos como meta el tener una sede estatal digna y propia. El PRD de Guerrero no puede andar errando en lugares prestados o rentados. Tenemos que dignificar la casa si queremos ser respetados. Lo mismo debe de ocurrir en los 81 comités municipales.
Necesitamos fortalecer y relanzar el Instituto de Formación Política. Es necesario crear y educar cuadros políticos y administrativos. El PRD es un partido que nunca se preparó para gobernar. Ha llegado la hora de hacerlo. Tenemos que fomentar cursos, diplomados y conferencias de exponentes nacionales e internacionales.
Lo más importante para el PRD de Guerrero es ventilar la casa, abrir las ventanas y permitir que entre el aire fresco. Es necesario un cambio generacional. Es necesario que también en el PRD el aparato y las corrientes que llevan lustros usufructuando el registro, permitan que una nueva generación tome las riendas del partido que Guerrero necesita.