Sentimientos de la Nación y Derechos sociales

Hoy 13 de septiembre de 2011 es un día muy especial para nuestro país y particularmente para Guerrero y Chilpancingo. Hace 198 años en la pequeña iglesia de Santa María de la Asunción se inauguró el Primer Congreso de Anáhuac, el Supremo Congreso Nacional Americano. Tradicionalmente a los chilpancinguenses de la sociedad este ha sido el día cívico por excelencia. Recuerdo como a mis abuelos Juani y Fide y a mis tías Natividad y Felisa, les provocaba una sensación de alegría y como maestras se apersonaban entre el auditorio. Hoy la ceremonia es mucho más política; es un día de conmemoración pero también de lucha, de reflexión sobre el papel de nuestro estado en las gestas libertarias del país y la factura pendiente de la república con nuestra gente. Morelos pronunció el día 14 el discurso que conocemos como Sentimientos de la Nación. El General se había impuesto como el generalísimo y en Chilpancingo se autoproclamó como Siervo de la Nación mostrando su vocación por la democracia y el papel del poder legislativo. Los constituyentes salieron protegidos por el ejército insurgente, después en Apatzingán aprobaron la primera Constitución y en Ario de Rosales el Poder Judicial. Morelos fue un fundador de instituciones antes de caer en manos de los realistas y ser fusilado en Ecatepec el 22 de diciembre de 1915. Los Sentimientos de la Nación además de ser ya la proclama por el México independiente, libre y soberano, contienen la esencia de los derechos sociales de los pueblos de México. Dentro de un par de años conmemoraremos el segundo centenario de tan singular congreso y son muy buenos días para que nuestro gobierno organice la reflexión ciudadana y amplié el proceso de cogobierno y la gestión por los derechos sociales ¿Dónde estamos hoy? En el país siguen predominando los privilegios. Un gobierno de izquierda recupera de la memoria histórica las lecciones y estoy seguro de que nos incumbe a todos un nuevo estilo de festejar, sobre todo leyendo, estudiando el contenido y combatiendo por la nobles causas y banderas que aun siguen vigentes. De los 23 sentimientos enumerados por Morelos recupero cinco que me parecen esenciales, ojalá que en nuestras escuelas y pueblos los directivos y luchadores sociales: 12º. Que como la buena ley es superior a todo hombre las que dicte nuestro Congreso deben ser tales, que obliguen a constancia y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia, y de tal suerte se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, alejando la ignorancia, la rapiña y el hurto. 14º. Que para dictar una ley se haga junta de sabios en el número posible, para que proceda con más acierto y exonere de algunos cargos que pudieran resultarles. 15º. Que la esclavitud se proscriba para siempre y lo mismo la distinción de castas, quedando todos iguales, y solo distinguirá a un americano de otro el vicio y la virtud. 17º. Que a cada uno se le guarden sus propiedades y respete en su casa como en un asilo sagrado, señalando penas a los infractores. 18º. Que en la nueva legislación no se admita la tortura. Una novedad democrática de este año es que el Congreso decidió otorgar la Presea Sentimientos de la Nación al doctor Pablo Sandoval Cruz. Este es un excelente mensaje desde las instituciones democráticas a la izquierda social y política. Me alegro y lo felicito con alegría solidaria. Además el 2011 trascenderá por la inauguración del hermoso Auditorio Estatal “Sentimientos de la Nación” Un local a la altura de las aportaciones de los chilpancinguenses a la historia patria.